Fiesta en el Jardín!

El 28 de mayo se festeja el día de los jardines, así que en el jardín estuvimos de fiesta: llevamos comida para compartir todos (sala de dos, sala de tres y los bebés) y había un pelotero en el patio.

No trabajamos, ni dibujamos, ni nada. Nos pasamos la tarde "saltando como locos" (N. del R.: palabras textuales de la protagonista) y comiendo. Para completar, había que ir disfrazados asi que mis primitas me prestaron un disfraz de "bicho verde" que usé muy contenta.

Mamá nos sacó algunas fotos en la vereda del jardín.

Seguidilla de cumples: ahora el de Papá

Dos semanas después del cumple del abuelo Carlos, viene el cumple de papá. Yo estaba muy motivada, sabía quién cumple antes y quién despues y venía ensayando para cantar el feliz cumple desde varios días antes.

El día del cumple justo me levanté medio chinchuda, así que Papá tuvo que esperar un rato hasta que me despejé y estuve de humor para saludarlo con un "feliz cumple", abrazo y beso fuerte con ruido.

Al mediodía almorzamos con la abuela Julia, y soplé las velitas en nombre de Papá. Hubo globos y bonetes, cantamos dos veces y me comí los palitos que decoraban la torta (después de todo, yo los había puesto... pueden ver la foto).

Para el regalo, Papá tuvo que esperar hasta el fin de semana: lo sacamos con Mamá de compras y le regalamos unas zapas para correr, las de él ya estaban muy viejas y con algunos agujeros, jaja.


Acá estoy decorando la torta con los palitos que después me comí.


Cantando el "feliz cumple" con bonetes y todo!


Esperando que Mamá reparta la torta. Dale Mamá quiero palitos de chocolateee!


Con Mamá y la torta... Papá no quería que se vean los números, jajaja.


Entregando las zapas nuevas!

El cumple del Abuelo!

Por supus, no podíamos faltar: nos apersonamos al mediodía para comer juntos y cantarle "Feliz Pumple" al abuelo.
Los globos los llevé yo, la velita la soplé yo, los aplausos fueron míos: fuí el alma de la fiesta, jaja.

Feliz Pumple, abuelo Karrrrlos!

Desayuno en Tiffany´s?

Mmmmm, no. Una merienda y charla con el gato en la cocina nomás.



Una galletita de limón para cada uno: el limonero está tan cargado que con Mamá estamos investigando recetas para tratar de ocupar parte de la cosecha. Este fin de semana hicimos estas "gayes" que salieron muy ricas.



Parece que el gato no se va a comer la de él, mejor lo ayudo.

Insólita marcha de protesta

Las manifestaciones de protesta antes de bañarse se han convertido en hechos habituales en los últimos tiempos, afortunadamente sin mayores incidentes ni heridos de consideración. Generalmente las "tareas represivas" se reducen a la captura y posterior ingreso al baño de la manifestante y nada más. Aclaro que son manifestaciones de índole pacífica (casi amistosa): sin llantos ni berrinches, solamente algunas carreras por la casa, gambeteos varios, etc.

Es por eso que la hoy no nos sorprendió en principio: comenzó una vez despojada de la ropa (solamente le quedaba la bombacha) y corriendo por su habitación al grito de "No me quiero bañar!".

Hasta ahi, todo normal (dentro de la locura nuestra de cada día).

La resistencia de la patronal a sentarnos a negociar, la inclinó a apelar a sus recursos mas extremos: se sacó la bombacha y una vez que quedó "al natural" empezó a correr por la casa gritando: "Diario!, diario!".

Manaña nos queda por averiguar si el gremio de canillitas respalda la protesta!
De regalo (y antes de la huelga general), una instalación que hicimos en colaboración. Técnica mixta: lápices, crayones y clips.